Hoy en día, los llamados jugos deportivos o de recuperación han tomado relevancia en los planes de alimentación de los deportistas. Se dice que sirven para desintoxicar, incrementar el rendimiento físico e incluso mejorar el funcionamiento renal y hepático pero, ¿qué tanta verdad hay en eso?
El ejercicio físico intenso aumenta la producción de radicales libres, moléculas que actúan como maleantes celulares dentro del cuerpo y llegan a provocar diversos daños y consecuencias a la salud. Los antioxidantes son los héroes de la película, pues protegen al organismo de dichos ataques. La principal fuente alimentaria de antioxidantes está contenida en las verduras y frutas. De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) el consumo de las mismas contribuye en la prevención de enfermedades crónicas como cardiopatías, obesidad, diabetes y algunos cánceres. Si bien la ingesta sugerida es de tan sólo 400 gramos por día, la mayoría de la población no la cumple por lo que el consumo de jugos naturales resulta buena alternativa para cubrir esta recomendación.
El consumo de antioxidantes contribuye en el control de la fatiga y la prevención de lesiones causadas por el ejercicio. Incorporar jugos tiene muchas ventajas, desde la facilidad hasta el alto aporte de antioxidantes que brindan. Para aprovechar al máximo sus propiedades es necesario que sigas las siguientes recomendaciones:
Usa verduras y frutas de temporada.
Lava y desinfecta las verduras y frutas.
Licua los ingredientes con agua.
Emplea vegetales crudos y con cáscara.
Evita frutas enlatadas o en conserva.
Elige una fruta por al menos dos verduras.
Si decides endulzar, prefiere miel o azúcar morena en lugar de refinada.
Consume inmediatamente después de prepararlo,
Comments